Muchas personas “fit” huyen de la mantequilla a la hora de comer, pero en mi caso es completamente opuesto. ¡Me encanta la mantequilla! 😍 Y lo mejor es que he descubierto sus beneficios tanto para la salud corporal como para la salud mental. ¿No me crees? ¡Descúbrelo aquí!
En Guatemala existe un dicho muy común que dice “untate de mantequilla y que todo lo que te digan te resbale” 🧈. Como se puede intuir, es un dicho que se utiliza especialmente para aconsejar a una persona que no le preste importancia a las críticas o comentarios negativos que pueda recibir de alguien por cualquier motivo. En mi caso, fue uno de los consejos que más recibí de personas cercanas antes de venir a vivir a España. ¿El motivo? Bueno… es de aceptar que los españoles a diferencia de los latinoamericanos son más toscos, directos y sinceros, y uno como latino, es más fácil pueda llegarse a sentir u ofender por lo que le digan, si no es dicho en un tono más suave, correcto y amable al que comúnmente estamos acostumbrados.
Así pues, embarco mi aventura al viejo continente llegando al territorio Español, donde intento seguir “el famoso consejo de la mantequilla”. He de confesar que al inicio fue bastante difícil y que aún, muchas veces, lo sigue siendo. Uno de los primeros comentarios que me impactaban al inicio y que ahora ya “tomo con mayor naturalidad” es cuando le propuse a una persona salir de paseo o a hacer X plan y me respondió que “no le apetecía” 😐, mientras que en Guatemala sería “Hay nos hablamos y vemos”. Y esa plática, nunca se lleva a cabo aunque guardes las “esperanzas” hasta el último momento.
Habrán personas que prefieran una u otra, eso te lo dejo a ti.
Pero en la situación en la que he descubierto que tienes que “untarte todavía más mantequilla” es en el caso de tu país de procedencia y si eres una persona creyente o religiosa. En Guate tenemos otro dicho que dice “es mejor no hablar de política, fútbol, ni religión”, mientras que en España parecen ser los tres temas preferidos. En mi caso, los primeros dos me son indiferentes, mientras que el tercero ha sido más complejo de sobrellevar, por las burlas y concepciones erróneas que tienen las personas ajenas a la fe católica o cristiana.
A veces tenemos que tener en cuenta que los comentarios o críticas que recibimos no son personales, y que muchas veces se agradece la sinceridad de las personas en lugar de estar dando vueltas a un tema por no ser honestos desde el inicio. Como me enseñó mi mamá “las cosas de donde vienen”, así que siguiendo este famoso consejo además, es más fácil que cualquier comentario imprudente o innecesario no te haga daño emocionalmente, y simple y sencillamente “te resbale”.
Estos ejemplos son aspectos que nos hacen diferentes 🙂, no solo por nuestra cultura sino por nuestra personalidad, y que en mi caso puedo decir que, te hacen más fuerte. ¡Eso sí! En ambos sitios nunca faltan aquellos que “se pasan de listos” con sus comentarios, pero eso ya es otra historia gorda en la que la mantequilla es el menor de los problemas. Mientras tanto, en donde te encuentres recurre a la mantequilla y descubre sus posibles efectos, cada vez más duraderos.
2 Comentarios
Totalmente cierto, pero a veces cuesta, más si se esta en un ambiente en el que de por si, uno no esta contento, ni cómodo..... yo suelo ser bastante directa y a mucha gente no le gusta, pero bueno, como tu dices, depende de la personalidad de cada uno , costumbre y país de origen.
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo! 😅En ambientes en los que no estamos al 100% cómodos o con personas que conocemos poco es algo complicado decir las cosas de forma directa. Por eso bueno ser lo más asertivos posibles y así las personas sabrán que eres franca con la mejor de las intenciones😃. ¡Mucho ánimo que seguro te irá bien!
Eliminar¡Me encanta saber que me lees! Déjame tu comentario y si no tienes cuenta de Google no olvides incluir tu nombre en el comentario para poder dirigirme a ti. 😉 - Manto